DESDE ATAQUINES A MEDINA
“No fue el león tan fiero como lo pintaron”
meteorológicamente hablando. Y es que el pasado día 23, ACASSE-VA tenía
programada su última etapa por el Camino del Sureste entre Ataquines y Medina
del Campo coincidiendo con las “atemorizadoras predicciones del tiempo atmosférico”.
Pero
los peregrinos auténticos se sobreponen a todas las dificultades y a las
10 en punto se encontraban junto al ayuntamiento de Ataquines…¡y con record de
participación!!! Nada más y nada menos que allí se preparaban para aguantar el
frío de la mañana hasta un total de 64 auténticos fenómenos dispuestos a
“comerse” los 18 km (en esta ocasión una etapa relativamente corta) que separan
las dos localidades vallisoletanas.
Pistoletazo de salida y para pasar al otro lado de la A-6, donde se sitúa el
“camino”, se utilizó una pasarela metálica que se encontraba totalmente
cubierta de nieve “virgen” pues, hasta ese momento, nadie la había hollado. Se
hizo con mucho tiento y en una decena de minutos todo el grupo avanzaba en la
misma dirección entre terrenos de labrantío arropados por una sutil capa
blanquecina conformando una estampa invernal que tardará en borrarse de las
retinas de los caminantes. La pista por la que trascurre este tramo del camino
se mostraba muy blanda, con nieve en sus orillas y abundante barro que se
solventaba sin peligrosidad. En grupo casi compacto llegaba a San Vicente del Palacio en un tiempo
de setenta minutos.
Se había circulado a bastante velocidad y era un buen lugar para el avituallamiento. Este acto de reposición de fuerzas cada etapa se hace más imprescindible gracias a las aportaciones de todos y en especial del grupo de Vega de Vadetronco. Mientras se degustan las diferentes viandas, los peregrinos aprovechan para comentar las incidencias de los kilómetros pasados y a la vez, darse ánimos para los que restan hasta llegar a Medina. El propietario del bar del pueblo se frota las manos porque considera que ya “ha hecho el día” y es que esta gente va dejando “riqueza” allá por donde pasan.
Se reinicia la marcha. El frío y un vientecillo helador empujaban
con insistencia al grupo que transitaba, ahora sí, frenados un tanto por el
barro que se acumulaba en la zona de “las salinas medinenses”. Poco a poco se
fue desmembrando debido a la dificultad de algunos tramos. Medina ya se
divisaba en lontananza lo que provocó una aceleración considerable. En torno a
las dos del mediodía se produjo el reagrupamiento programado a las puertas de
la histórica localidad isabelina. Se
cumplían las dos y treinta minutos por el reloj de la Colegiata de San Antolín
en la Plaza Mayor de la Hispanidad. El restaurante “El Arte” de la Rinconada
ofreció un magnífico almuerzo y un buen servicio que se alargó hasta media
tarde. Como de costumbre se cerró la jornada jacobea con cánticos tradicionales
y el “himno del peregrino”.
ACASSE-VA cierra aquí las etapas por el Camino del Sureste, ya que el resto hasta Benavente se han realizado anteriormente. A partir de marzo dirigiremos nuestro caminar hacia tierras zamoranas por el Camino de Levante siendo la primera etapa entre Medina, Nava del Rey y Siete Iglesias de Trabancos.
Dos apuntes en plan informativo:
En la segunda quincena del mes de marzo se
prevé la inauguración del albergue de Tordesillas, aunque ya desde la Semana
Santa pasada ha recibido a peregrinos. Coincidiendo con esa fecha se programará
un horario de “puertas abiertas”, durante unos días, para todas aquellas
personas interesadas en conocerlo.
El día 31 de marzo, Domingo de Resurrección,
30 miembros de ACASSE-VA iniciarán unas jornadas de peregrinación entre
Roncesvalles y Los Arcos, localidad riojana cercana a Logroño.