PEREGRINACIÓN A FISTERRA

Cuando hablamos de peregrinar a Santiago, parece que siempre nos referimos al camino por excelencia y el más transitado que es el Camino Francés. Pero hay otras rutas que en los últimos años se están poniendo en valor y que muchos peregrinos optan por ellas bien huyendo de la masificación y las carreras por encontrar albergues o por otros motivos de vivencias personales. Verdad es que todos los caminos tienen atractivos suficientes para ser seleccionados en el momento de iniciar la peregrinación jacobea. La Asociación del Camino de Santiago del Sureste en Valladolid (ACASSE-VA) como continuación a la realizada el pasado Año Santo, se encaminará hacia Finisterre. Después de dar el abrazo al Santo y recibir su bendición, las etapas del Camino de Finisterre son un perfecto epílogo para terminar de sosegar el alma y purificar el cuerpo en las bravas aguas del Atlántico en la “Costa da Morte”. La costumbre dice que el peregrino, cuando llega al “Finis Terrae” de los romanos, destruye algunas pertenencias maltrechas y usadas en el largo Camino, en un acto de purificación y renovación. Pero lo que realmente sorprende, por ser un espectáculo indescriptible, son las puestas de sol, al atardecer. Lentamente se sumerge en la aguas del Océano coloreándolas de rojo – sangre, en un juego de profundidad, luces y colores. Entre los días 24 y 30 del presente mes de abril, una veintena de socios de ACASSE-VA recorrerán los 90 km que separan Santiago de Finisterre con inicio en la Plaza del Obradoiro, junto a la catedral, y final en los acantilados sobre los que se asienta el faro. Las cuatro primeras etapas constan de 20 km y la última, entre Sardiñeiro y Finisterre, de unos 10 km. La primera parte transita por el interior de Galicia y la parte final por las cercanías de la costa entre pueblos marineros tan conocidos como Cee, Corcubión y Finisterre, cuya playa de la Langosteira forma parte del camino. El hospedaje se hará en albergues privados pues al ser un grupo numeroso se recomienda buscar una alternativa a los públicos. Desde Finisterre y utilizando medios de locomoción se trasladarán hasta Muxía para visitar el santuario de Nuestra Señora de la Barca, lugar en el que según una leyenda la Virgen María llegó en barca para alentar al apóstol en su ardua tarea apostólica.